Capítulo 27: Vergüenza

Las acciones policiales contra los laicos a raíz de la JMJ dan VERGÜENZA.
Se supone que la manifestación laica en contra de que se use nuestro dinero para que venga el Papa a España (con toda la razon, desde mi punto de vista) estaba autorizada. Y, sin embargo, la policía, ante una situación en la que tanto laicos tcomo peregrinos se provocaban mutuamente, decide liarse a porrazos y guantazos con los que se estaban manifestando legalmente.
Esa brutalidad policial da vergüenza.

Y dignos y cochinos señores peregrinos (cochinos, sí, no había más que ver la cantidad de basura que ha dejado toda esa juventud, cuando los del 15-M limpiaban en sol y se les calificaba de todo menos de guapos) me gustaría deciros que por mucho que digáis, no creo que a Jesús le gustara ver el negocio que se ha hecho con su Iglesia, ni oír vuestras opiniones sobre los homosexuales y, desde luego, le repugnaría que prefiriérais ver que preferís que millones de personas mueran de sida y millones de niños mueran de hambre en África porque, como usar preservativo es casi como asesinar, pues nada, que se extiendan virus mortales y que nazcan niños que sus padres no pueden alimentar.
¿No veis que algo falla?

No tengo tiempo de escribir mucho más. Bien es verdad que han ocurrido muchas cosas en estos meses que me han hecho hervir de ira pero los estudios y las vacaciones sin parar por casa me han hecho imposible el pasarme por aquí.
Sólo quiero decir que el movimiento del 15-M tiene todo mi apoyo y que si las manifestaciones por nuestros derechos pudieran prescindir de aquellos que provocan que la policía se tire sobre los msnifestantes porque unos pocos han decidido lanzarles botellas o destrozar el mobiliario urbano, se ganaría en credibilidad.

Juglaresa